Valencia es, cada día que pasa, una ciudad más y más agradable con el peatón y por ende con los niños. Porque son los niños quienes corren sin miedo y exploran con el único ánimo de satisfacer su curiosidad.
Gracias al clima y al antiguo cauce del río Turia, Valencia se puede disfrutar casi en cualquier momento del año. Los cientos de kilómetros de carriles bici o el jardín del Turia pueden servir como eje central para hacer visitas muy divertidas para los niños, repartidas por toda la ciudad.
Valencia con niños
Dejando a un lado las visitas a los monumentos más importantes, las que enumero a continuación son las que considero más entretenidas y accesibles para niños de cualquier edad.
Parque Gulliver

El Parque Gulliver es una gran sorpresa si no conoces Valencia. Es un juego de toboganes, escaleras y cuerdas con la forma de Gulliver tras llegar al país de los liliputienses. No puedes visitar Valencia con niños sin pisar el Gulliver.
La entrada es gratuita y abre a las 10 de la mañana. La hora de cierre depende del mes del año. En verano cierra al mediodía pero vuelve a abrir hasta las 21 horas, mientras que en los meses de más frío el horario es ininterrumpido hasta las 17:30.
El Parque está en el Jardín del Turia, a la altura del puente Ángel Custodio. Hay una zona con césped alrededor, donde la gente acampa o incluso celebra cumpleaños. Hay diversos aparcamientos para bicicletas.
Los niños disfrutan mucho de esta atracción, de la que es posible que vuelvan a casa con los pantalones rasgados o rotos. Lo mejor es que vayan con un pantalón que ya esté desgastado.
En bici hasta La Marina
Como decía al principio, el antiguo cauce del río Turia se puede utilizar como eje central para moverse por toda la ciudad, sin la presión de estar rodeados de tráfico.
Por ejemplo, para ir a la playa de la Malvarrosa o la Patacona, puedes utilizar el Jardín del Turia hasta la zona de la Ciudad de las Ciencias y desde aquí tomar el carril bici que lleva hasta la Avenida del Puerto y de ahí a La Marina.
Es un paseo muy agradable, rodeado de jardines, zonas infantiles y mucha gente haciendo deporte o dando una vuelta. Puedes acceder al carril bici del antiguo cauce en cualquier parte de Valencia. Hay un carril bici en cada lado, son seguros y tranquilos, puedes circular por ellos con niños de cualquier edad.
En cuanto llegues al Museo de Ciencias, sal del cauce y toma el carril bici que va por la calle Menorca, al lado de El Corte Inglés. Debes seguirlo hasta la avenida del Puerto y ahí seguir todo recto hasta el puerto.
En el puerto encontrarás el antiguo reloj, que se puede visitar, los tinglados con los yates de fondo y los nuevos edificios que ocupan el antiguo varadero, justo antes de llegar al emblemático Veles e Vents,donde suelen haber competiciones y eventos.
Detrás hay más jardín, con zona infantil y muchos restaurantes, con vistas a la playa de Las Arenas.
Antes de ir, comprueba si hay algún evento en La Marina porque casi todos los fines de semana hay algo.
Paseo en barca en l´Albufera

L´Albufera está ubicada a unos 15 kilómetros de la ciudad, todavía dentro de la demarcación de Valencia. Rodeada únicamente por naturaleza, es uno de los parques naturales más valorados y más amenazados.
Se puede visitar a pie o en barca. Hay diversos amarres en el puerto de El Saler, el embarcadero de la Gola del Pujol, El Palmar y el puerto de Catarroja, desde donde parten excursiones en grupo o privadas. Encontrarás por Internet sitios donde se pueden reservar, pero también puedes hacerlo acudiendo allí directamente.
Descubrir el Mercado Central

El Mercado Central de Valencia es uno de los más bonitos del mundo, pero seguramente a tus hijos eso les importará poco. De momento, todavía no aprecian la arquitectura, pero quedarán enamorados de la mezcla de colores y olores.
El recinto del Mercado está muy cerca del centro de Valencia, justo frente a la Lonja de la Seda. Desde la entrada principal se ve casi todo el ancho del mercado. Es grande, así que tardarás un rato en recorrerlo todo.
De momento mantiene su esencia y no ha sucumbido a los puestos turísticos que venden productos procesados. Casi todo lo que se vende en el mercado es producto natural. Encontrarás fruta, pescados, carnes, legumbres, verduras…
La visita al Mercado Central es un disfrute para los sentidos. Puedes salir de allí con un bote de aceitunas o los ingredientes para la comida del sábado.
Abre todos los días excepto los domingos, de 7:30 a 15 horas.
Subir a las Torres de Serranos

Las Torres de Serranos son uno de los símbolos de la ciudad. Son la antigua puerta de entrada a Valencia y la mejor conservada de las dos que quedan en pie.
Los escalones son bastante anchos, así que si vas con niños menores de cinco años debes tener cuidado y ayudarles a subir. La visita es gratuita los domingos y te permite subir hasta lo más alto e imaginar cómo era la vida para los vigilantes que miraban el horizonte esperando la llegada de los enemigos.
Es un experiencia inolvidable para los niños, que disfrutan como si estuviesen en un castillo, mientras aprenden historia y memorizan todos los detalles para utilizarlos más tarde con imaginación.
Las Torres están frente al puente de serranos y la calle del mismo nombre, que lleva directamente al Palau de la Generalitat.
Visitar un museo

Domingos, festivos y algún sábado por la tarde, muchos museos de Valencia son gratuitos. Otros tantos son gratuitos siempre.
Aunque no lo creas, los niños se lo pasan genial descubriendo sitios nuevos y, aunque no entiendan de arte, curiosean y disfrutan de experiencias inéditas en sus vidas.
Algunos de los mejores museos para ellos son el Centre Cultural Carmen, que además tiene una sala reservada para menores de 3 años, donde pueden jugar, saltar y tumbarse, el MUVIM, el IVAM y el museo de Ciencias Naturales, que está ubicado en el Jardín de Viveros y cuenta con una excelente colección de fósiles de América del Sur.
Otro museo divertido, aunque es de pago todo los días, es L´iber, que cuenta con una inmensa colección de soldaditos de plomo. Uno espectacular es Príncipe Felipe, en la Ciudad de las Artes y las Ciencias.
Probar el tobogán del Parque Central

El Parque Central de Valencia es el último gran jardín de la ciudad, construido en la zona adyacente a las vías del tren, que pronto deberían ser soterradas para dar lugar a un parque más grande.
De momento, el Parque Central cuenta con mucho jardín, una zona dedicada al agua, varios edificios rehabilitados donde realizar conferencias y charlas, y un parque para niños, que cuenta con un tobogán de metal muy largo, rocódromo, columpios y otro tipo de juegos. Es un tipo muy agradable donde pasar un rato tranquilos.
Los primeros días tras su inauguración hubo gente que se quejó porque se coge bastante velocidad y, si no mides, puedes pegarte algún golpe leve. Pero los niños saben lo que hacen y disfrutan.
Museo de soldaditos de plomo

En pleno barrio de El Carmen, en un palacio del siglo XIV, hay un pequeño museo que es una gran idea para hacer con niños en Valencia.
Se trata del más grande museo de soldaditos de plomo del mundo. Comenzó con la exposición de la colección la familia Noguera y desde entonces se ha convertido en un referente cultura de la ciudad.
Actualmente hay expuestas 95.000 piezas en 16 salas con diferentes temáticas.
La entrada cuesta 8 euros y es gratuita para menores de 4 años.
Autocine
Si llegas con automóvil a la ciudad del Turia, una de las actividades más divertidas que hacer con niños en Valencia es disfrutar de un par de películas al aire libre o desde el interior del coche.
Para los pequeños es una aventura que comienza con el viaje hasta El Saler, una pedanía de Valencia, la cena y las películas. Hasta El Saler hay apenas unos 15 minutos en coche. Es fácil llegar.
El autocine Star está abierto todo el año. Cuesta 6 euros por persona y 3 euros por el vehículo. Los menores de 3 años no pagan. Además, está permitida la entrada de animales y de comida del exterior.
Cine 3D en l´Hemisferic

En la Ciudad de las Artes y las Ciencias, es primer edificio que se construyó fue el más pequeño. L´Hemisfèric es, sin embargo, el preferido para muchos.
Con forma de ojo de pez, en su interior alberga una sala redonda donde se emiten películas divulgativas y documentales 3D con sonido envolvente. Es una experiencia maravillosa, que los niños disfrutan muchísimo si sólo han ido a cines convencionales.
Generalmente, l´Hemisfèric tiene precios muy competitivos y suele hacer ofertas muy llamativas en épocas de vacaciones escolares.
Además, antes y después de la película puedes pasear por el genial jardín que lo rodea.
Merendar horchata y fartons

Aunque la horchata es valenciana, no todos los días la merendamos los valencianos. Es más, mucha gente solo la prueba en verano.
En Valencia y en Alboraia hay un buen número de horchaterias donde pegarse una buena merienda rodeados de huerta. Por ejemplo, la horchateria Vida, que está a las afueras de Alboraia, no tiene nada alrededor excepto huerta.
Cuenta con un parking para coches y se puede llegar en bici por el carril que llega desde la Ronda Nord de Valencia. Tiene terraza y zona para niños.
Es importante ir pronto porque los fines de semana y días de verano suele llenarse. Es una horchateria muy solicitada. Comprueba el horario antes de ir, ya que en algunos momentos del año suelen cerrar.
Si no te apetece llegar hasta Alboraia, puedes optar por otras horchaterías tradicionales como Daniel, Sarriers, Rin o, en el centro de Valencia, Santa Catalina.