Cracovia es la ciudad más visitada de Polonia, así que como puedes imaginar tiene miles de opciones para alojarse en ella. Hoteles, hostales, apartamentos, sillones..
Ya he comentado en alguna otra ocasión cómo preparo los viajes. Cada uno tiene su manual de instrucciones. En mi caso, suelo reservar los alojamientos antes incluso de contratar el vuelo.
Así lo hice también esta vez. Hotel en Varsovia y hostales en Gdansk y Cracovia. Sin embargo, cuando publicamos en redes sociales que iríamos a Polonia, la empresa española Muchosol, con quien mi mujer ha colaborado en varias ocasiones, nos dijo que ellos tienen apartamentos en Cracovia.
Miramos el catálogo y decidimos cambiar el hostal por un apartamento a, exactamente, tres minutos del centro de Cracovia. No miento si digo que jamás me había sentido tan cómodo alojado en un apartamento.
En Cracovia pasamos dos noches. Llegamos muy pronto, en avión, procedentes de Gdansk, pero ya habíamos pactado con Muchosol dejar las maletas en su oficina y así visitar la ciudad hasta la hora de la entrada. Para mí, muy tarde. Hasta las 16 horas no pudimos entrar. Es uno de los pocos puntos negativos.
Hasta la hora del check-in casi pudimos visitar toda la ciudad. Recogimos el equipaje y nos fuimos al apartamento, a veinte minutos caminando de la estación de tren, donde está la oficina.
Para entrar en el edificio es necesario un código y la llave del apartamento la dejan en una mini taquilla, al lado de la puerta, con apertura mediante otro código. El edificio está totalmente rehabilitado y no dispone de ascensor. Todas las ventanas son interiores. Dan a un patio que comparten varios edificios. En ese patio hay, además, una terraza de una cafetería Starbucks.
Todos los servicios
Da la impresión que el edificio es la parte trasera de otro o en algún momento fue el que utilizó el personal de servicio.
El apartamento sería ideal para vivir, para una persona y perfecto para una pareja con hijos, de viaje. Es pequeño, un espacio para la cocina, el comedor y el salón y otro, arriba, para la habitación. Bajo el altillo está el baño, grande y con bañera. Con dos grandes ventanas y otra en el tejado.
Está totalmente equipado, con SmartTV, equipo de música, horno, cocina… Todo es nuevo y está muy bien decorado. Además, el sofá se convierte en una enorme cama de matrimonio. Nuestra hija de dos años estaba entusiasmada por dormir ahí ella solita.
Por poner otro pero, al lado hay otro apartemento, de la misma empresa y se escuchan mucho los golpes. Aunque, en su defensa diré que esto depende de los «vecinos». Nosotros no damos golpes y creo que la mayoría de la gente tampoco.
Nosotros utilizamos mucho el apartamento. Aprovechamos la cocina y la nevera para desayunar y cenar allí, e incluso pusimos una lavadora.